TEXCOCO, Méx. 28 de junio 2017.- La lluvia y el deslave de tierra dejó al descubierto una tumba clandestina a un lado del camino de terracería del cerro La Cañada en San Jerónimo Amanalco.
Ahí estaba sepultada a unos 30 centímetros de profundidad, una mujer, pero con el tiempo solo quedó su esqueleto y sus prendas.
El delegado municipal, Gerónimo Durán Velázquez, dio aviso a la policía de ese hallazgo que se encontró a las 14 horas.
Las autoridades locales dieron parte a la agencia del ministerio público para que su personal recogiera los restos.
Se presume que la mujer fue asesinada y luego su cuerpo sepultado en ese lugar, pero por las constantes lluvias, la tierra se deslavó y dejó al descubierto el esqueleto.
Las autoridades ministeriales trasladaron todos los restos al forense local para hacer la investigación correspondiente.